Lo siguiente es un extracto del artículo “Qell’Nudar, historia de los orígenes”, publicado por la revista “Los Descubrimientos”, tomo 26, que es anualmente publicado por la división de xenosociología de la Soberanía Steccashi.
“Los Qell’Nudar son mamíferos de dieta omnívora, con una piel rugosa y resistente cubierta de pelos en lo que es la parte frontal y lateral del cuerpo y de púas afiladas en lo que es la nuca, la espalda, y la cabeza. Según sus propios científicos, su especie surgió hace aproximadamente cincuenta mil años en Qell, un planeta más helado que el nuestro, dónde las fuentes de agua dulce en estado líquido son escasas, y dónde la lluvia en este estado es rara, por no decir imposible, dadas las bajas temperaturas, siendo la norma la nieve o el granizo.
Si bien se esperaría que esta especie fuera adaptable a diferentes ambientes y situaciones, habiendo vivido y prosperado en un entorno tan hostil para nosotros, nos hemos encontrado con que son bastante frágiles, más que nuestra propia raza, ante los cambios de índoles medioambientales. Tanto es así, que la sociedad Qell’Nudar gira frenéticamente en torno al uso de fuentes renovables de energía y al consumo responsable de los distintos recursos naturales, encargándose el mismísimo Gobierno Central de llevar a cabo extensas campañas de educación y de control agro-industrial, siendo tan ecologistas en sus políticas y legislaciones que casi rayan en un fanatismo enfermizamente sano para los mundos que habitan (véase “anécdotas populares”, página 2014).
La dura naturaleza en Quell obligó a las primitivas comunidades de los Quell’Nudar a tener una forma de vida sedentaria, que se mantiene, hasta hoy, fuertemente arraigada en su sociedad y mentalidad gracias a la cultura, al proceso de crianza de los individuos y al discurso de algunas religiones oficialmente reconocidas, que profesan la importancia de los Orígenes Personales. Aunque, cabe destacar, que esta inmovilidad provocó ventajas extraordinarias para esta especie que ahora recorre el universo asegurándose un dominio entre las estrellas: no hay criatura presente en el cosmos conocido que sea igualmente buena en cultivar la tierra, por más estéril que ésta sea, y en minar hasta las profundidades de la corteza planetaria en busca de metales o gemas preciosas. Esta especialización, reflejada en la gran mayoría de los casos a niveles macroeconómicos regionales, tira luz sobre los motivos detrás de los rasgos más militaristas de la cultura Quell’Nudar, que desde temprano ha tenido que guerrear cuando los intercambios comerciales eran imposibles o injustos a ojos de una u otra comunidad (Véase “La Guerra de las Potencias”, página 2041, la cual terminó instaurando el Comisariado Militar como método administrativo planetario), cosa que también llevó a un fanatismo culturalmente arraigado por la justicia en los tratos comerciales y la sociedad.
Finalmente cabe destacar algo sobre esta especie, algo por lo cual este artículo, o por lo menos este párrafo, nunca será leído por un Qell’Nudar dentro de la Liga de Qell: pese a que por fuera su gobierno se profesa democrático, abogado por las libertades civiles y lo justo que es el poder del pueblo para el pueblo, la realidad es que detrás de cada elección hay un círculo de individuos que toman todas las decisiones sobre el destino del estado y quien lo gobierna. Creemos que este Consejo que manda muy por encima del Comisario General se fundó hace aproximadamente trescientos año para evitar así que los Qell’Nudar se destruyeran durante la era de la Amenaza Nuclear, tiempos en los que el fanatismo por la justicia y los medios militares para alcanzarla podría haber llevado a cualquier Estado-Nación de Qell a bombardear con proyectiles nucleares a sus enemigos o rivales si estos no les daban tratos justos en el comercio o el respeto a sus ciudadanos dentro de sus fronteras.”



“Los Qell’Nudar son mamíferos de dieta omnívora, con una piel rugosa y resistente cubierta de pelos en lo que es la parte frontal y lateral del cuerpo y de púas afiladas en lo que es la nuca, la espalda, y la cabeza. Según sus propios científicos, su especie surgió hace aproximadamente cincuenta mil años en Qell, un planeta más helado que el nuestro, dónde las fuentes de agua dulce en estado líquido son escasas, y dónde la lluvia en este estado es rara, por no decir imposible, dadas las bajas temperaturas, siendo la norma la nieve o el granizo.
Si bien se esperaría que esta especie fuera adaptable a diferentes ambientes y situaciones, habiendo vivido y prosperado en un entorno tan hostil para nosotros, nos hemos encontrado con que son bastante frágiles, más que nuestra propia raza, ante los cambios de índoles medioambientales. Tanto es así, que la sociedad Qell’Nudar gira frenéticamente en torno al uso de fuentes renovables de energía y al consumo responsable de los distintos recursos naturales, encargándose el mismísimo Gobierno Central de llevar a cabo extensas campañas de educación y de control agro-industrial, siendo tan ecologistas en sus políticas y legislaciones que casi rayan en un fanatismo enfermizamente sano para los mundos que habitan (véase “anécdotas populares”, página 2014).
La dura naturaleza en Quell obligó a las primitivas comunidades de los Quell’Nudar a tener una forma de vida sedentaria, que se mantiene, hasta hoy, fuertemente arraigada en su sociedad y mentalidad gracias a la cultura, al proceso de crianza de los individuos y al discurso de algunas religiones oficialmente reconocidas, que profesan la importancia de los Orígenes Personales. Aunque, cabe destacar, que esta inmovilidad provocó ventajas extraordinarias para esta especie que ahora recorre el universo asegurándose un dominio entre las estrellas: no hay criatura presente en el cosmos conocido que sea igualmente buena en cultivar la tierra, por más estéril que ésta sea, y en minar hasta las profundidades de la corteza planetaria en busca de metales o gemas preciosas. Esta especialización, reflejada en la gran mayoría de los casos a niveles macroeconómicos regionales, tira luz sobre los motivos detrás de los rasgos más militaristas de la cultura Quell’Nudar, que desde temprano ha tenido que guerrear cuando los intercambios comerciales eran imposibles o injustos a ojos de una u otra comunidad (Véase “La Guerra de las Potencias”, página 2041, la cual terminó instaurando el Comisariado Militar como método administrativo planetario), cosa que también llevó a un fanatismo culturalmente arraigado por la justicia en los tratos comerciales y la sociedad.
Finalmente cabe destacar algo sobre esta especie, algo por lo cual este artículo, o por lo menos este párrafo, nunca será leído por un Qell’Nudar dentro de la Liga de Qell: pese a que por fuera su gobierno se profesa democrático, abogado por las libertades civiles y lo justo que es el poder del pueblo para el pueblo, la realidad es que detrás de cada elección hay un círculo de individuos que toman todas las decisiones sobre el destino del estado y quien lo gobierna. Creemos que este Consejo que manda muy por encima del Comisario General se fundó hace aproximadamente trescientos año para evitar así que los Qell’Nudar se destruyeran durante la era de la Amenaza Nuclear, tiempos en los que el fanatismo por la justicia y los medios militares para alcanzarla podría haber llevado a cualquier Estado-Nación de Qell a bombardear con proyectiles nucleares a sus enemigos o rivales si estos no les daban tratos justos en el comercio o el respeto a sus ciudadanos dentro de sus fronteras.”
Seguiré actualizando esto cada tanto, a medida que voy teniendo tiempo para escribir ¡Que tengan un buen día!