Un Mauser curioso: el modelo belga de .30-06

[Kurt_Steiner]

Estrictamente hablando, el fusil belga Mle. 50, un diseño de calibre .30-06 Springfield Mauser, fue un arma posterior a la Segunda Guerra Mundial. Tampoco fue el último rifle militar de cerrojo fabricado después de la Segunda Guerra Mundial, ni fue el único que usó .30-06. Sin embargo, sigue siendo un fusil olvidado de la era de cerrojo que se desvaneció en gran medida con el final de la guerra en 1945: combinó el cartucho de rifle de la época usado por EEUU, probablemente el mejor de la guerra, con las características operativas de fusiles europeos como el 98k alemán, que había dominado los conflictos durante medio siglo. Este rifle fue el último hurra de la generación de la Segunda Guerra Mundial.

Durante la ocupación alemana de Bélgica, un armero belga llamado Dieudonne Saive llegó a Gran Bretaña. Se llevó consigo el concepto de un nuevo rifle semiautomático avanzado que había estado defendiendo desde finales de la década de 1930, el EXP-1. Si el gobierno belga no se hubiera demorado, este diseño, a la par del M1 Garand de esa época, podría haber estado en servicio cuando comenzó la Segunda Guerra Mundial en 1939. En cambio, Bélgica todavía estaba fabricando Mauser de cerrojo en vísperas de la invasión de 1940.

Durante la última parte de la Segunda Guerra Mundial, Saive reunió un equipo de diseño conocido como Groupe 72. Bélgica fue liberada entre septiembre y noviembre de 1944. Este equipo se dividió, tomando dos caminos. Uno era poner el EXP-1 en producción para el ejército belga reconstituido. El otro recibió muestras del cartucho 7.92 Kurz de Alemania (la munición del StG-44) para desarrollar un diseño totalmente automático aún más avanzado, en lo que se concibió como un proyecto conjunto británico-belga. Finalizada la Segunda Guerra Mundial, el EXP-1 finalmente se aprobó en 1947 y durante 1948 comenzó tardíamente la producción en masa como SAFN-49.

Un SAFN-49.

Mientras tanto, la otra vía del Groupe 72 montó un prototipo llamado "Carabina Universal" en noviembre de 1947. Aunque tenía una recámara de 7.92 Kurz, usaría un cartucho experimental británico .280 como munición planificada, pero este fue abandonado y, en su forma final, la Universal Carbine se convirtió en un rifle de asalto, el FN FAL, usando el proyectil de 7.62 OTAN. El FAL entraría en servicio entre 1953 y 1956 y, con más de 2 millones fabricados, y reemplazaría los rifles de la era de la Segunda Guerra Mundial en todo el mundo durante la década de 1960.4

¿Qué pinta, pues, en todo esto, un Mauser de calibre .03-06?

Un Mle. 50

 

[Kurt_Steiner]

Finalizado el conflicto mundial, Bélgica tuvo que reconstruir sus fuerzas armadas, aniquiladas en mayo de 1940 salvo por las pocas tropas evacuadas a Gran Bretaña y el ejército colonial del Congo. Asi, el nuevo ejército fue reequipado con fusiles Enfield No.4 Mk.I de segunda mano donados porcel Reino Unido.

Si bien el Enfield no era una mala arma, no era lo que Bélgica buscaba a largo plazo. Bélgica nunca había utilizado el cartucho británico .303 antes de la Segunda Guerra Mundial, y no tenía interés en usarlo en el futuro.

En 1948, tres años después de la Segunda Guerra Mundial, el SAFN-49 estaba comenzando su ciclo de producción, pero pasaría un tiempo antes de que se integrara por completo en el ejército. Todavía existía la posibilidad de que algun problema imprevisto pudiera afectar al SAFN-49 una vez en servicio; siendo el primer rifle semiautomático belga. No había garantía de que el proyecto del rifle de asalto (el que eventualmente se convirtió en FAL) entrara en servicio.

También hubo un problema ajeno a las cuestiones militares, ya que FN había sido una buena fuente de ingresos gravables y comercio para Bélgica antes de la Segunda Guerra Mundial. Se consideró preferible secuestrar los gastos de defensa dentro de la economía nacional en lugar de comprar armas en el extranjero.

Fabrique Nationale, situada en la ciudad de Herstal, en el noreste de Bélgica, fabricó el Mle. 35, que era el más moderno de los cuatro rifles "estándar" del ejército belga al comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Era un rifle corto de cerrojo estilo Mauser similar en forma y función al 98k alemán y a los "rifles de contrato" de exportación que habían convertido a FN en una empresa rica. En particular, durante la era de la Gran Depresión, los fusiles Mle 24 y Mle 30 destinados a la exportación se vendieron muy bien en América Central y del Sur.

Los Mle. 35 que tenía Bélgica en 1940 que sobrevivieron a la invssion fueron requisados por la Wehrmacht bajo la designación Gewehr 262 (b).

Contrariamente a lo que se cree hoy en día, FN no fue una fuente importante de rifles 98k durante la ocupación. Algunos se fabricaron con la marca de fabricantes "ch" asignada, que también aparece en las municiones 7.92 Mauser fabricadas para la Wehrmacht durante la ocupación. Un pequeño número de fusiles comerciales Mle. 24/30 también se fabricaron. Pero en su mayor parte, los alemanes usaron FN para fabricar cañones y pernos de 98k "en bruto" para uso de los fabricantes 'oficiales' del 98k. Junto con las pistolas (que se fabricaron ampliamente de principio a fin ee la ocupación), este trabajo permitió que la maquinaria de FN anterior a 1940 permaneciera en Herstal durante la Segunda Guerra Mundial en lugar de que la empresa se disolviera.

Herstal fue liberado por el avance de las fuerzas aliadas en septiembre de 1944. Durante los últimos cinco meses de la Segunda Guerra Mundial en Europa, y continuando después hasta 1946, FN reinició las operaciones renovando las armas ligeras del Ejército de EEUU. Estos contratos probablemente salvaron a la empresa de la extinción.

Empleados de FN reacondicionan armas del ejército de los EEUzu en 1945. Los modelos fueron el rifle M1 Garand, el subfusil M3 y las carabinas M1 / M2. Antes de que terminaran los contratos en 1946, se reacondicionaron dos millones de armas estadounidenses.

 

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Sorprendentemente, las plantillas de FN para hacer el contrato de exportación de antes de la guerra de los rifles Mle. 24/30 sobrevivieron a toda la Segunda Guerra Mundial. Durante 1948 FN fabricó la "Carabina de la policía holandesa", una mezcla del Mle. 30 y del 98k con recámara con el calibre 7.92 Mauser, para Holanda. Pero las perspectivas inmediatas de la empresa en el extranjero eran sombrías. El mundo estaba inundado de excedentes de rifles ¡de la Segunda Guerra Mundial y pocos países pagarían por unos nuevos cuando los ejemplares usados con cuidado eran tan baratos.

Mientras tanto, en casa, el ejército belga estaba buscando una forma de bajo costo y sin riesgos para cerrar la brecha entre las armas aliadas de la Segunda Guerra Mundial donadas y los diseños futuros. A medida que la década de 1940 llegaba a su fin, se decidió que la mejor solución sería una aparentemente retrógrada :usar un nuevo rifle de cerrojo, aunque la era de los cerrojos estaba terminando e incluso cuando algo mejor estaba en producción.

El calibre elegido fue el .30-06 Springfield. El ejército estadounidense tenía gran cantidad de esta munición, específicamente la variante de bola M2, en Europa que estaba dispuesto a vender. Bélgica ya lo había seleccionado como calibre para el próximo SAFN-49.

Como prueba en 1946, un Mle. 35 de calibre 7,92 Mauser se convirtió a .30-06 Springfield. Se cortó una muesca en forma de ∩ en el lado delantero del receptor para acomodar el cartucho estadounidense, un poco más largo. Se extendió la placa del piso del cargador y se volvió a colocar el cañón y se reabasteció. Las miras se ajustaron para la caída balística diferente del cartucho estadounidense. En general, esto fue un éxito. Bélgica ordenó que el restante Mle. 35 (que probablemente no eran muchos en ese momento) se conviertan a .30-06, con la nueva designación Mle. 35/46.

El siguiente paso fue poner en producción y servicio un rifle de cerrojo estilo Mauser diseñado desde el principio para .30-06 Springfield. Este sería el Mle. 50.

Un rifle Mle. 35/46

 

[Kurt_Steiner]

El paso aparentemente regresivo de presentar un nuevo rifle de cerrojo después de que la Segunda Guerra Mundial terminara, en realidad tenía sentido por la situación de Bélgica a fines de los años 40. En 1949 todo este proyecto era solo un "puente" entre los antiguos Enfield británicos y el SAFN-49. Un rifle de cerrojo básico con cero costos de desarrollo sería bastante asequible para los estándares de principios de los años 50.

No hubo riesgo técnico para el proyecto. FN tenía décadas de experiencia con el sistema Mauser. El Mle. 35/46 ya había probado la plataforma Mauser adaptable al cartucho .30-06 Springfield.

Asimismo, la elección de municiones tenía todas las ventajas posibles. Ya se probó en batalla durante dos guerras mundiales, estaba ampliamente disponible a un costo mínimo a fines de la década de 1940 y sería compatible en el futuro con los rifles que los belgas desplegarían en las próximas décadas.

(Después de que las existencias baratas de .30-06 sobrantes de la Segunda Guerra Mundial se terminaron, FN simplemente fabricó este cartucho, con una tirada que va hasta finales de la década de 1960 y en pedidos al contado, una década más o menos después de eso).

La nomenclatura de los rifles FN suele ser confusa y el .30-06 Mauser no fue una excepción.

EL nombre Mle. 50 en realidad nunca fue oficial dentro del ejército belga. La designación oficial fue Fusil Mle. 24 (Modelo de 1924), que también era el nombre de venta comercial de FN para el Mle 24 de 7.92 Mauser hechos para la exportación entre las guerras mundiales, a pesar de usar municiones completamente diferentes, tener otros cambios y fabricarse en la década de 1950.

En cualquier caso, Mle. 50 es usado por la mayoría de los historiadores de armas de fuego para este rifle.

 

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Los Mle. 50 fueron grabados con las siglas "ABL", un acrónimo de "Armée Belge" y "Belgisch Leger"; ambos significan Ejército belga en francés y flamenco, los dos idiomas oficiales de la nación. Debajo estaba el año de producción. Encima del receptor estaba la marca de propiedad nacional, una corona con la inicial del monarca. El Mle. 50 es históricamente interesante en este sentido, ya que su breve producción transcurrió en un momento tumultuoso dentro de la monarquía belga.

Un Mle 50 producido antes de la abdicación de Leopoldo III, el 16 de julio de 1951

Un Mle 50 con la B de Balduino, sucesor de Leopoldo.

Un Mle 50 de la Force Publique desplegada en el Congo

 

[Kurt_Steiner]

La colonia de Bélgica en África central, el Congo Belga, era infinitamente más grande que la propia Bélgica. Tenía un ejército defensivo local llamado Force Publique.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el Congo Belga permaneció del lado de los Aliados, incluso cuando la propia Bélgica estaba bajo ocupación alemana. El rifle principal de la Force Publique durante la Segunda Guerra Mundial fue el Mle 89/36, una reconstrucción de la era de la Gran Depresión del Mauser Modelo 1889. Usó un cartucho de 7,65x53 mm fabricado por FN (generalmente llamado 7,65 argentino en el resto del mundo). Cuando se cortó el reabastecimiento de este calibre durante 1940, Gran Bretaña donó algunos Enfield y munición de .303 a la Force Publique.

La adquisición del Mle 50 de la Force Publique se realizó de una manera un tanto extraña. La fuerza colonial no era parte del ejército belga. Los rifles y las municiones no fueron elegidos ni ordenados por el estado mayor belga, sino por el Ministère des Colonies (Ministerio Colonial), que tenía oficinas en Leopoldville y Bruselas. Después de la Segunda Guerra Mundial este sistema se reanudó en 1945.

De acuerdo con lo anterior, los Enfield fueron retirados del servicio entre 1948 y 1951 y reemplazados por pequeños lotes de Mle 30 comerciales anteriores a la Segunda Guerra Mundial, de los cuales se adquirieron varios lotes pequeños a fines de la década de 1940 con recámara en 7,65 argentinos. Al mismo tiempo se reordenaron cantidades significativas de munición argentina de 7.65 para el obsoleto Mle. 89/36, al que se pretendía mantener en servicio junto con el nuevo Mle. 30 años

Poco tardaron en lamentar haber adquirido munición argentina de 7.65 y durante 1951 se encargaron fusiles SAFN-49 de .30-06 Springfield. Sin embargo, la Force Publique tendría que esperar a que el ejército regular belga se reequipara, lo que podía tomar cierto tiempo . Como medida provisional, se ordenaron Mle.50 ese año.

Todas las armas de la Force Publique provienen de la producción de 1952. Aparte de las diferentes marcas antes mencionadas, eran las mismas que la línea Mle. 50 original.

Algunos Mle 50 de la Force Publique en manos privadas hoy carecen de Suncorite; se desconoce si esto se debe a que el recubrimiento se desprendió por completo con el paso de los años o si se entregaron de esa manera.

 

[Kurt_Steiner]

Durante la Segunda Guerra Mundial, el ejército colombiano usó una variedad de rifles de cerrojo estilo Mauser, principalmente el Steyr M-1929 austriaco y la versión comercial del FN. Mle 30; ambos de 7x57mm. Colombia estuvo del lado de los Aliados durante la Segunda Guerra Mundial, pero no envió ninguna unidad al frente y, por lo tanto, recibió préstamos y arriendos limitados de los Estados Unidos.

En 1948 Colombia se convirtió en elegible para la ayuda del Pacto de Río y se esperaba que llegaran cantidades significativas de rifles estadounidenses excedentes de la Segunda Guerra Mundial. De hecho, esto fue lo que sucedió con las entregas que comenzaron después de la Guerra de Corea. A mediados de la década de 1960, Colombia había recibido cerca de 10.000 M1 Garand.

Mientras tanto, Colombia se encontraba en una situación no muy diferente a la de Bélgica: primero quería eliminar los muy viejos Steyr M-1912 restantes y luego los Steyr M-1929; reemplazándolos con algo en .30-06 Springfield para que coincidiera con la munición de las futuras entregas esperadas del M1 Garand. Sin embargo, con un presupuesto limitado, este nuevo rifle intermedio tendría que ser asequible y sin complicaciones.

Un arsenal colombiano volvió a albergar algunos fusiles anteriores a la Segunda Guerra Mundial.: los FN Mle 30 de 7x57mm a .30-06 Springfield. Esto fue un éxito. Colombia ya tenía una buena relación con FN desde antes de la Segunda Guerra Mundial y se hizo un pedido de Mle. 50 Se cree que se encargaron 3.000 fusiles.

En todo menos en las marcas, los rifles colombianos eran iguales a los belgas.

Este pedido fue seguido por FN que ayudó a los arsenales colombianos a volver a colocar el resto del FN Mle 30 anteriores a la Segunda Guerra Mundial, además de rifles en 30-06 Springfield también. Los Mle 50 colombianos eran muy queridos, considerados de excepcional calidad y muy duraderos.

El Mle. 50 sirvió junto con M1 Garand en el ejército colombiano de la década de 1960 e incluso más tarde durante la década de 1970, junto con M14. El último no se retiró hasta 1988.

Un Mle 50 con el escudo colombiano y adaptado para usar munición .03-06 Springfield

 

[Kurt_Steiner]

Hubo una versión final del Mle. 50, un rifle de entrenamiento de calibre .22LR.

Antes de la Segunda Guerra Mundial, el ejército belga entrenaba con balas especiales de entrenamiento fabricadas por la empresa Marga. Estos tenían balas semifrangibles de un compuesto similar al plástico. El cartucho tenía una imprimación normal pero solo un poco de pólvora sin humo mezclada con una bola de papel nitrado, que producía menos potencia.

La compañía Marga no sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial. En lugar de desarrollar un nuevo cartucho de entrenamiento, FN optó por adoptar el Mle. 50 para .22LR como un arma de entrenamiento de puntería básica económica de un solo disparo.

La mira trasera se modificó para que fuera de 0 a 200 metros en incrementos de 25 m. Una placa dentro de la cámara bloqueaba bien el cargador. Como no había cargador, el protector del gatillo se extendió hacia adelante en una pieza de metal larga y continua. El percutor estaba equipado con un adaptador de percusión anular en forma de disco delante del resorte principal del cerrojo.

Después de que el FAL entró en servicio a mediados de la década de 1950, Bélgica modificó entre 500 y 700 de estos rifles de entrenamiento con una simple mira de dioptrías atornillada en la parte trasera del receptor. Un pequeño tornillo de fijación permitía realizar ajustes minuciosos.

No hubo una designación formal para estos entrenadores .22LR, simplemente se llamaron Fusil d'Entrainement (rifle de entrenamiento). FN fabricó 1.000 de los cuales 300 fueron enviados al Congo Belga que solicitaba urgentemente un tipo de entrenador de municiones de bajo costo. Los enviados allí aparentemente fueron designados informalmente como "Mle. 1924(C)” de la Force Publique.

Cuando el ejército israelí contrató a FN para ejecutar una versión 7.62 con cámara de la OTAN del 98k, también compró una versión de entrenamiento .22LR del 98k basada en el Fusil d'Entrainement.

Estos fueron un éxito en el servicio belga, con la munición de percusión anular barata de .22LR mucho más asequible que la de .30-06 Springfield para entrenamiento básico. Estos terminaron siendo el último remanente del Mle. 50 en servicio con el ejército belga; el último no se retiró hasta 1986.

 

[Kurt_Steiner]

El Mle. 50 hizo todo lo que se suponía que debía hacer. Fue una forma rápida, sin riesgo y de bajo costo para pasar del 7.92 Mauser y el .303 al .30-06 Springfield. Mantuvo el dinero de los contribuyentes belgas dentro del país. No hubo problemas con él en el servicio. Mientras que el Mle. 50 estaba “obsoleto desde el principio”, esto se había aceptado desde el principio. FN hizo 20.000 más el contrato colombiano y los fusiles de entrenamiento de .22.

Los Mle. 50 estuvieron en servicio de primera línea solo por un corto tiempo. Permanecieron en unidades de segunda línea o de entrenamiento y finalmente reservando uso tanto con el ejército belga como con la marina por más tiempo. Después de que el ejército los eliminó, algunos se entregaron a la Gendarmería belga, que todavía tenía algunos a fines de la década de 1970.

Mientras que el Mle. 50 en sí hizo todo lo que se esperaba de él, la tecnología de rifles belga realmente no progresó como se esperaba. Todavía quedaban Enfield donados a finales de la década de 1950. El SAFN-49 se hizo famoso como "el rifle que no cambió el mundo", un diseño semiautomático que llegó demasiado tarde para ser lo que habría sido un rifle avanzado de la Segunda Guerra Mundial, ya eclipsado por los fusiles de asalto ,

Aunque los Mle. 50 nunca vieron combate en Europa, no ocurrio lo mismo con los enviados al Congo Belga.

En 1958, cuando se tomó esta foto, la Force Publique tenía una colección de rifles que iban desde FN FAL hasta SAFN-49, pasando por el Mauser de cerrojo en dos calibres hasta el viejo Mle. 89/36 de la Segunda Guerra Mundial.

En un lío caótico, el Congo Belga obtuvo su independencia como la República del Congo el 30 de junio de 1960. La Force Publique se transformó en el nuevo ejército congoleño; una fuerza mal equipada y mal dirigida. Heredó la amplia variedad de fusiles que habían equipado Force Publique al final, incluido Mle. años 50.

Entre 1963 y 1965, el Congo tuvo una grave insurrección conocida como la Rebelión de Simba. Comenzando en la región oriental de los Grandes Lagos, los Simbas (leones) eran una mezcla heterogénea de desertores del ejército, miembros de tribus agitadas y comunistas. Su “revolución” fue excesivamente brutal y muy violenta. A pesar de carecer casi de entrenamiento militar, los Simbas pronto ocuparon casi un tercio de la gran nación.

Unos simbas armados con un SAFN-49, un Mle. 50 y un rifle de caza civil Mauser.

El ejército congoleño corrupto, mal financiado y mal dirigido todavía tenía a Mle. 50 en servicio y algunos de estos también fueron manejados por los Simbas, quienes también usaron casi cualquier cosa bajo el sol, desde el viejo Mle de la Segunda Guerra Mundial. 89/36 a nuevos SKS y SAFN-49 a Mosin-Nagants a armas de caza civiles.

Las unidades de mercenarios, la más famosa de las cuales fue el Comando 5 de "Mad" Mike Hoare, fueron fundamentales para finalmente cambiar el rumbo. EL 5o Comando no usó Mle. 50 o cualquier arma de cerrojo. Sin embargo, a menudo se le unió una subunidad del ejército congoleño a las unidades mercenarias (que nunca ascendían a más de unos pocos cientos de hombres) para “limpiar” el territorio recuperado. Estas unidades congoleñas a menudo tenían Mle. 50 con recámara en .30-06, lo que fue una ventaja, pues EEUU ayudaba al Congo y este calibre estaba más disponible que el 7.65 argentino a mediados de la década de 1960.

La eficiencia del rifle en combate es difícil de medir, ya que el ejército congoleño a menudo operó de manera pésimo en el campo de batalla. Fueron retirados en Zaire (el renombrado Congo) durante la década de 1970, aunque aparentemente algunos todavía permanecieron en el inventario local hasta 1987.