Capítulo 1: El Fin de los Días 1939-1969
Nadie sabe muy bien cómo ocurrió el denominado milagro español, tras la guerra civil y la posterior guerra mundial españa cayó en el sumidero de la historia una vez más, los intentos de los maquis por extender la guerra a la península ibérica acabaron de manera desastrosa tras la fallida invasión del valle de arán, en las que fueron masacrados por las tropas franquistas en aquel octubre del año 1944. La guerra acabó y el régimen del general cual animal herido se encerró sobre sí mismo y tanto el mundo como españa se dieron la espalda una vez más, y así siguió hasta el año 62. Tras la segunda guerra mundial los antiguos aliados contra la gloriosa alemania del tercer Reich se habían enquistado en una guerra fría, en la que se disputaban zonas de influencia, de esta lucha había quedado fuera españa después de frustrarse los acuerdos de Madrid entre el régimen Franquista y la administración Estadounidense, las pretensiones americanas de instalar bases permanentes en Canarias, Madrid, Barcelona y Valencia fue visto como un intento de controlar al estado, que poco a poco gracias a los recursos extraídos del sahara comenzaba a mejorar su economía.
20 años más tarde de la gloriosa reconquista de españa el mundo se levantaba sobresaltado, los noticiarios aquel 14 de Octubre abrían con la misma noticia los pérfidos comunistas sovieticos habian desplegado un sistema de misiles en Cuba, la hora que los agentes españoles llevaban tiempo esperando había llegado. La cuerda entre los dos gigantes se encontraba tan tensa que solo hacía falta que alguien cortara una fibra para que la cuerda acabara destrozada. Y esto es lo que hicieron los gloriosos mártires de la restauración española, una explosión en el metro nueva york, cientos de muertos, unos pasaportes rusos entre los restos del vagón, una explosión en Moscú, otros cientos de muertos y la rueda de la destrucción se cierne sobre el mundo, la gente de aquellos tiempos llamo a ese 14 de Octubre como el día del juicio final, los arsenales de las dos potencias nucleares se desplegaron contra su enemigo, ciudades como Paris, o Londres sufrieron graves ataques, otras simplemente dejaron de existir, en un día de locura el mundo vio como parecían más hombres que en los 6 años de guerra mundial. Tras el devastador ataque los supervivientes de cada bloque huyeron en desbandada, algunos pretendiendo formar sus propios reinos de taifas, el mundo se convirtió en una tierra sin orden y peligrosa. Algunas naciones resistieron sobretodo las naciones de los países no alineados en áfrica y sudamérica, y por supuesto España.
Pero lo peor aún estaba por llegar, el mundo se vio sumido en un invierno nuclear, el clima se volvió más frío, las zonas del norte de europa en apenas meses se vieron sumidas en temperaturas árticas, los supervivientes a los ataques nucleares emigraron al sur o perecieron. España vio como de la noche a la mañana como la tundra empezaba a cobrar forma en las Vascongadas y Asturias, durante 2 años se sucedieron inundaciones en toda la meseta castellana, cosa que aprovecho el generalisimo para impulsar la creación de pantanos y centrales hidroelectricas, Andalucía y Extremadura se beneficiaron de estas lluvias y se convirtieron en el granero del Imperio. En Argel el gobierno francés en el exilio cae ante una insurrección de los argelinos contra los refugiados franceses tras una ley que permitía expropiar a los argelinos de sus tierras para realojar a los inmigrantes llegados de francia, tras este hecho los nativos comienzan a masacrar a sus antiguos amos, ahora refugiados en tierra extranjera, el caudillo ante la llamada del papa
Pablo VI de salvar las almas de los miles de católicos franceses, da la orden de comenzar los ataques. Las nuevas armas de impulsión de masa mediante electromagnetismo desarrolladas a partir de planos de nikola tesla, resultan fundamentales, las balas atraviesan los blindajes del enemigo como mantequilla, en menos de un mes el gobierno provisional argelino cae, los continentales supervivientes salen a la calle a festejar con los libertadores españoles.